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5 tendencias en pagos digitales para 2024: Segmento B2B aumentará la apuesta en los negocios

Escrito por Clara | ene 9, 2024

En los últimos años, el segmento B2C se ha convertido en uno de los mercados más competidos a nivel global, más aún en Latinoamérica, con grandes jugadores en el ecosistema ofreciendo beneficios atractivos a los consumidores, desde tasas de interés competitivas, hasta altos rendimientos en cuentas digitales. Sin embargo, en el último año, el segmento B2B también ha visto amplia oportunidad para ofrecer productos ágiles e innovadores a empresas de todo tipo e industria.

De acuerdo con Youmna Harb, Country Manager de Clara, solución líder para que las empresas realicen y gestionen todos sus pagos, el segmento de pagos empresariales será sin duda uno de los más crecientes en el año y comparte algunas tendencias en 2024 para este rubro:

El panorama de pagos B2B presenciará un notable aumento en soluciones de finanzas integradas. Las empresas incorporarán cada vez más servicios financieros directamente en sus plataformas, permitiendo experiencias de pago fluidas y centralizadas. Se espera que este cambio optimice los procesos financieros, reduzca la fricción en la experiencia de cada transacción y permita a los equipos gestionar recursos con mayores controles. Un ejemplo de esta tendencia es la forma en que ahora es posible integrar soluciones de pago como Clara con sistemas ERP, a fin de mejorar la eficiencia operativa y reducir el tiempo dedicado a tareas como la conciliación financiera.

La automatización jugará un papel fundamental en la revolución de los pagos B2B. La inteligencia artificial será aprovechada para agilizar los procesos de facturación, y optimizar la gestión del flujo de efectivo. Esta integración no solo mejorará la eficiencia, sino que también proporcionará a las empresas información valiosa para la toma de decisiones estratégicas.

"Una de las nuevas funcionalidades en nuestra plataforma y que es impulsada por inteligencia artificial, tiene que ver con la conciliación automática de facturas, donde cada transacción es ligada con su correspondiente factura, sin necesidad de procesos manuales, lo que implica mayores ahorros en tiempo y costos”, afirma Harb. “Otra función impulsada por esta tecnología, es la de ahorros inteligentes , donde a través del comportamiento de gasto de nuestros usuarios, podemos hacer recomendaciones que les eviten incurrir en gastos repetidos o innecesarios de acuerdo a su operación.” 

Las empresas incorporarán procesos que permitan transacciones respetuosas con el medio ambiente, como facturación sin papel y programas de compensación de carbono, alineando las operaciones financieras con la responsabilidad ambiental. Podremos comenzar a ver poco a poco el fin de los papeles de reembolso e incluso la reducción de tarjetas de crédito de plástico, que cada vez más son sustituidas por tarjetas virtuales; las cuales, de acuerdo con datos de la plataforma de Clara, en el último año se han emitido en un 25% más que en su versión física. ​ 

En Latinoamérica las billeteras digitales ​ se han convertido rápidamente en uno de los métodos de pago de más rápido crecimiento, las cuales están incentivando a menor uso del efectivo, debido a la trazabilidad, facilidad de uso, seguridad y rapidez en las transacciones, pero sobre todo a la conveniencia general, ya que no hay que esperar a la creación de tarjetas físicas para realizar una primera transacción, lo que reduce la fricción en la experiencia del cliente. 

Reconociendo la importancia crítica de la seguridad en las transacciones B2B, Clara anticipa un enfoque intensificado en protocolos de seguridad avanzados. Desde la autenticación biométrica hasta la detección de fraudes impulsada por inteligencia artificial, las empresas priorizan medidas robustas para salvaguardar la información financiera sensible y garantizar la integridad de las transacciones. Una característica destacada es el SSO (Inicio de Sesión Único), que mejora los protocolos de seguridad al proporcionar un mecanismo de autenticación centralizado, reduciendo la necesidad de múltiples contraseñas y minimizando las superficies de ataque, mejorando así la seguridad general del sistema.